REPORTAJE A LUIS MUÑOZ POR SERGIO GILABERT


REPORTAJE A LUIS MUÑOZ POR SERGIO GILABERT DE RELATOS POR UN ASCENSO Y LA TRASTIENDA FUNEBRERA

Luis Muñoz, ¿nos cuenta como nace la historia pasional entre CHACA y usted?

Nací en el seno de una familia peronista en Ballester, en la calle Alvear al 500. Donde el tema de las conversaciones en la mesa familiar de mis padres con mis abuelos eran exclusivamente políticas. Por parte de mi madre, de vascos  independentistas (abertzales) oriundos de Nafarroa, Euskal Herría. Por parte de mi padre - mendocino de San Rafael - de comunistas de la década de los 20. No había lugar para el fútbol. Era 100% política. Todos ellos se habían vuelto peronistas a partir del 45.

Aunque mi mamá y mis abuelos vascos, eran simpatizantes del Osasuna de Iruñea (Pamplona), Nafarroa (Navarra), País Vasco (Euskal Herría). Y mi papá (y mi abuela paterna también) eran - y mi viejo sigue siendo hoy a sus 90 años - hincha de Deportivo Argentino de San Rafael. Pero el fútbol era un tema absolutamente secundario y rara vez motivo de conversación familiar. Asi que llegue a la escuela primaria sin ser hincha de nadie. Mis intereses pasaban más por el satélite Sputnik, la perra Laika o la resistencia peronista que por un club y eso que jugaba al fútbol con mis amigos del barrio.

Mi viejo era colectivero de la línea 8 de Ballester y el patrón mandó a hacer a nuevo el motor del colectivo (aún recuerdo que era el interno número 27). Antes de volver a ponerlo en línea había que “ablandar” el motor y por orden del dueño, mi viejo agarró a mi madre y a sus dos hijos y salimos a “ablandar” el “27” de viaje por la provincia de Buenos Aires. Y el recorrido elegido nos llevó a Junín donde pernoctamos y al día siguiente resultó que jugaba el club local Sarmiento contra un equipo de “San Martín”. Era Chaca.

La cancha se llamaba Eva Perón (aunque los milicos del 55 habían volado con explosivos el nombre en molde de cemento de la cancha). La cancha era toda de cemento  y mucho había tenido que ver en eso Evita. La mezcla de peronismo y San Martin incentivó a mis viejos y decidieron que fuéramos a ver el partido. Por los usos y costumbres de la época y más en una localidad del interior bonaerense, en el sector local del estadio había un espacio destinado exclusivamente para las familias (matrimonios con hijos menores). Y desde allí vimos el partido.

Así que me hice de Chaca (al igual que mi hermano, 2 años menor que yo) jugando de visitante y desde la platea de los locales. En mi caso no encuentro razones por las cuales me hice hincha de Chaca ese día. Supongo que a esa edad carecía de ellas. Me hice. Punto.

Cuando me agarra un ataque de determinismo histórico digo que el destino decidió por mí. Y si fue así, el resultado de ello es que soy el hombre  más feliz del mundo en materia de fútbol. Estaba escrito. Y si esto huele a fundamentalismo, lo lamento, será un problema para los que son extremadamente racionales.

Por lo que a mi respecta ya como padre y después como abuelo me ocupe que mis cinco hijos (4 mujeres y un varón - con una diferencia entre la mayor y el menor de 13 años) y mi nieto mayor (mis otros dos nietos son muy pequeños aún) fueran hinchas de Chaca. Conforme cumplían los 4 u 5 años los llevaba a la cancha y  como rito de iniciación en el primer partido los hacía trepar en el alambrado de la Gutiérrez. Algo similar hice para qué fueron ricoteros. A partir de los 10 u 11 años de edad me ocupé de llevarlos a las Misas del Indio.

¿Por que cree que Chacarita Juniors, habiendo sido uno de los campeones del fútbol argentino, está en la situación que hoy nos encuentra?

Las razones son históricas y de composición extremadamente compleja. Una sumatoria negativa donde se entremezclan en distintas proporciones la persecución política de la que fuimos objeto durante la dictadura genocida cívico-militar, la violencia practicada por parte de la barra nuestra durante la primavera democrática de Alfonsín y el mazazo aniquilador de la década de los 90 que sufrimos a través de dos tsunamis: la llegada al club del barrionuevismo (que destruyó cualquier asomo de democracia y actividad política institucional por parte de la masa societaria) y la llegada de la globalización al país, que cristalizó primero y aumentó de manera escandalosa después las diferencias ya existentes entre clubes grandes y chicos. El sistema comenzó a funcionar desde esa época (hasta hoy) a favor de solo unos pocos que casualmente eran los más poderosos.

Solo escaparon a esa suerte unos pocos clubes de nuestro tamaño, aquellos que lograron una concurrencia estratégica de desarrollo sustentable en el tiempo entre la dirigencia de los mismos y las fuerzas vivas y políticas de las sociedades locales donde estaban insertos.

Cuando por ejemplo hablamos de los logros de Lanús, olvidamos por falta de memoria, desconocemos por ignorancia o invisibilizamos por mala fe - que Lanús tuvo el acompañamiento económico constante por parte del municipio durante 24 años (desde 1983 hasta el 2007) durante las seis gestiones comunales de Manuel Quindimil del Partido Justicialista.  Eso no pasó ni pasa en San Martín desde hace décadas. Y cuando ha habido alguna ayuda desde el municipio, han sido migajas que dan vergüenza ajena y que para colmo fueron dadas por meros intereses políticos. Los resultados están a la vista. Pero ojo, el responsable no es solamente nuestro club y la municipalidad. También una buena parte de la responsabilidad le corresponde a la sociedad sanmartinense, fundamentalmente a los sectores más adinerados y acomodados de la misma que siempre le dieron la espalda a Chaca. 

Políticamente hablando, Chacarita Juniors: ¿de que forma puede mejorar desde su punto de vista?

Posesionándose desde dos lugares distintos pero concurrentes.

Primero somos, aunque fuera contra nuestra voluntad,  una marca registrada nacional. Por ejemplo, la palabra Banfield o Vélez no significa absolutamente nada en gran parte de las provincias de nuestra Patria. No ocurre lo mismo con nuestro club. Decís la palabra Chacarita y todo el mundo sabe a lo que uno hace referencia.

No es casual por ejemplo que en Jujuy y desde que el movimiento social Tupac Amaru de Milagro Sala decidiera hace ocho años atrás que su vasta organización participara en todos los campeonatos de las ligas infantiles y de inferiores a nivel provincial, eligieran nuestra camiseta. Tenían centenares de camisetas para elegir: Boca, River, Barcelona, la que se les ocurriera de esas que salen 24 x 24 en los canales televisivos de deportes. Sin embargo, eligieron la nuestra. Y en esa elección  - otra vez y van - nada tuvo que ver nuestro club. Más aun, casi nadie en Chaca (autoridades, socios e hinchas) sabía de ello. Bueno, Chacarita es una marca registrada en gran parte del corazón del pueblo argentino, no solo de los que somos hinchas funebreros. Debemos sacar rédito de ello en todos los ámbitos para beneficio de nuestro club.  

Segundo, y es un tema de actualidad candente, aprovechar la por primera vez equilibrada correlación de fuerzas existentes entre los dos bloques en que está dividida la AFA y hacer causa común con la fracción del Ascenso, la única que nos asegura que en el futuro no seamos víctima de una desfinanciación ex profeso de la que seríamos blanco si la ganadora fuera la fracción encabeza por los grandes.

Si el bloque del ascenso más las ligas interiores y los equipos chicos de primera se hacen con la conducción de la AFA no solo se nos asegura ingresos frescos a futuro sino ganar el tiempo necesario en lograr el equilibrio definitivo de nuestras cuentas.

Hoy mantenemos el mismo endeudamiento en moneda nacional con la AFA que hace cuatro años atrás y en ese mismo plazo hemos logrado reducir el endeudamiento con acreedores privados.  Es una oportunidad de oro que no debemos desaprovechar. Ojalá que los distintos candidatos que aspiran a conducir al club sean conscientes de ello.

Usted hace rato que esta trabajando e insistiendo en que es necesario el cambio de estatuto o mejor dicho de la reforma del mismo ¿que cosas habría que cambiar en forma inmediata?

Gran parte de lo que venimos peleando desde Chacanoticias.Info desde el 2002 y desde el 2015 a través de la agrupación Parlamento Funebrero, una vez más no es tomado en cuenta en el proyecto de nuevo estatuto que vamos a votar el 25 de junio. Peor aun, agrava la de por si injusta arquitectura jurídica del estatuto de 1976 y profundiza una serie de exclusiones e instala ciertas minorías privilegiadas.

El detalle de nuestro análisis sobre el nuevo estatuto, para  quien desee informarse o tenga curiosidad intelectual y/o política lo podrá encontrar convenientemente desarrollado en el siguiente link abreviado: LEER AQUÍ

A pesar de lo dicho, plantearemos su aprobación a libro cerrado y por aclamación para proteger los que consideramos dos avances para nada despreciables que solo una ceguera sectaria podría desconocer: la disminución de la antigüedad para votar de 5 a 3 años y la reducción de la cantidad de avales para la existencia de las agrupaciones políticas del club.

En cuanto a las enormidades en la que incurre el nuevo estatuto empeorando el de 1976, seguiremos nuestra lucha político institucional para generar espacios y consensos que lleven a la formación de una masa crítica que permita cambiar la correlación de fuerzas y haga factible una mayor democratización del club que pasa pura y exclusivamente por un mayor empoderamiento político de la masa societaria.

De ahí nuestra propuesta de la creación de una Asamblea de Representantes de Socios (Parlamento Funebrero o Cámara de diputados funebreros), institución jurídica-política a la cual nuestra clase dirigencial desde hace 40 años se opone férreamente.

Peleamos de manera pública y política desde hace 14 años por una reforma, pero una reforma no excluyente. Nuestra línea política es clara al respecto y no va a variar: no cejar en nuestras convicciones de democratizar el club empoderando políticamente a la masa societaria. En una estrategia sin tiempo. Seguiremos en la lucha política. Como siempre.

Se dice que hay algún malestar en los miembros de comisión directiva, por que se dice que la definición de la Asamblea que llama por la reforma del estatuto del próximo 25 de Junio, no fue tratada precisamente en CD. ¿Lo ve bien?

Más que malestares, desde mi punto de vista,  son las lógicas discrepancias que en todo proceso electoral se dan en cualquier ámbito político. Y Chaca no es una excepción ni debe serlo. Es parte del juego democrático y sus reglas.

Aquí el único peligro para Chaca es el apoliticismo, propio o inducido por terceros. Sobre su nefasta influencia remito a su caracterización social del mismo al célebre poema de Bertold Brecht en el siguiente link abreviado LEER AQUI

Luis, se acercan las elecciones, ¿como ve esto de que se hable que pueden surgir 3 listas distintas?

En un régimen democrático deben existir sin límite alguno todas las opciones por las que pueda expresarse el electorado. Lo peor que nos puede pasar es votar por el menos malo o no votar.

Por lo tanto no siento temor alguno por la existencia de tres o más listas. Más aún, me parece formidable.

El dogma de que debe haber una lista de unidad es a esta altura del partido de una ingenuidad formidable, de una ceguera política preocupante o posee fines inconfesables. Nada más peligroso para la salud institucional del club que todo termine en una lista de unidad entre visiones absolutamente contrapuestas sobre lo que hay que hacer institucionalmente y económicamente dentro del club. Terminaría siendo una triste y lamentable bolsa de gatos. Irremediablemente, porque toda política tiene sus propias diferenciaciones, surgirían las lógicas diferencias irreconciables entre distintos proyectos políticos y explotarían dentro del club haciendo añicos institucionalmente a Chacarita.

Para preservar a nuestro club de ese peligro de implosión interna los distintos proyectos políticos en juego deben dar batalla electoral y la masa societaria tener el derecho de optar por el que considera es el mejor o mayor empatía le produce

No soy de escaparme por la tangente. Menos en política. El sistema de listas de unidad ha servido por ejemplo en la vida sindical argentina para perpetuar en el poder a burocracias dirigenciales que nada tienen que ver con los intereses de la clase trabajadora.

Y respecto a Chaca y relativo a mí postura política: cuando me hablan de unidad:

¿Me quieren obligar a aceptar una unidad con intermediarios de figuras como Barrionuevo o Capriotti? ¿O con los que poseen el apoyo de formaciones políticas que propician la entrega de los clubes a empresas privadas? Absolutamente NO. No,  al menos en mi nombre

Usted es parte de una agrupación, la cual trabaja con muchos jóvenes, ¿tienen apetencias políticas a futuro de llegar a la presidencia del club?

Soy una persona que comenzó a militar en política a los 16 años. Hoy tengo 63 años. Y fuera de Chaca y dentro de Chaca siempre lo he hecho por considerar que el sistema vigente debe mejorarse a favor de las mayorías. Nunca concebí la militancia como algo individual sino como pertenencia a un proyecto colectivo. Desde hace medio siglo sigo haciendo mía esa  concepción. Y cuando uno se siente integrante de un colectivo que expresa justas reclamaciones, el cargo es lo de menos.

Dicho esto, no es menos cierto que desde lo personal lo que mas me apasiona en los colectivos es la formación de futuros cuadros políticos institucionales para prepararlos para el gobierno de las cosas dirigidas al bien común. Mucho más que la conducción propiamente dicha de un colectivo.

Aunque debo admitir que varias veces en mi vida y por razones que impone la propia realidad (la única verdad) he tenido que estar a la cabeza o integrar mesas de conducción. Por lo tanto no es una cuestión de capacidad o si uno se considera apto o no para ello porque sé por experiencia propia que doy la medida. Solo es una cuestión de preferencias intelectual y política.

Luis, ¿como ve el futuro de nuestro querido CHACARITA JUNIORS?

Soy optimista porque estamos ante un proceso electoral y no hay nada mejor que los distintos proyectos (antagónicos algunos de ellos entre sí) sean sometidos al veredicto del voto de la masa societaria. Y que el más votado sea el que acceda al gobierno por decisión soberana de los socios.

Ojo, no es que el pueblo nunca se equivoca. Bien lo resaltó Raúl Alfonsín cuando fue derrotado en una situación que el caracterizó como de corrimiento hacia el conservadurismo pero que él consideraba motivado porque la sociedad había sido confundida ex profeso desde los poderes de facto.

Dijo en esa oportunidad: "si es cierto realmente que la sociedad se derechizó... entonces la UCR debe prepararse para perder elecciones en lugar se hacerse conservadora".

Ese concepto me lo aplico a mi mismo en cada instancia política y electoral que vivo desde hace medio siglo. 

Estimado Luis Muñoz, conocedor como pocos de nuestra verdadera historia, que le dice al lector de nuestra pagina desde su punto de vista, en nuestro Chaca ¿que se viene y que se perdió por hacer?

Se viene la oportunidad, dada la situación existente en AFA y en el club, de consolidar un camino que necesita de muchas mejoras por cierto pero que apunta a mediano plazo a obtener un club equilibrado económicamente.

Una vez conseguido ese equilibrio el objetivo primordial es potenciar al máximo nuestras inferiores pues es desde ellas, como elemento fundamental de nuestro patrimonio,  que se consolidará la viabilidad y sustentabilidad económica de nuestro club.

A este objetivo debe supeditarse todo el resto, inclusive el fútbol profesional. Soy socio, no solo hincha y por lo tanto me interesa primordialmente la salud institucional, patrimonial, económica y financiera de Chacarita Juniors.

Y finalmente aclaro - porque es primordial para el futuro que se nos avecina: hablo de un Chacarita Juniors que siga siendo como lo quisieron nuestros padres fundadores una asociación civil sin fines de lucro. O sea, en las antípodas de la ideología neoliberal que viene postulando de manera cada vez más agresiva y totalitaria que los clubes deben transformarse en sociedades anónimas o que las inferiores deban ser gerenciadas total o parcialmente por empresas privadas, sean locales o extranjeras.

Quiero seguir siendo hincha de Chaca, no de una empresa privada.
Quiero que en Chaca decidan y gobiernen los socios, no los accionistas de una SA.